«Gracias a su capacidad de hacer un zoom preciso a cortas distancias, la vigilancia aérea puede, en combinación con otras tecnologías de identificación automatizada, permitir catalogar sin esfuerzo a los individuos y sus actividades.» POGO (Project On Government Oversight)
Acerca de: La vigilancia con drones es el uso de vehículos aéreos no tripulados o sin piloto (UAV) para capturar imágenes y vídeos con el fin de recopilar información sobre objetivos específicos, que pueden ser individuos, grupos o entornos. Hay cientos de tipos diferentes de drones. Pueden ser tan grandes como un avión comercial o tan pequeños como una mosca común, e incluyen tanto aeronaves humanas guiadas a distancia como vehículos autónomos y autoguiados.
¿Cómo funciona? Los drones pueden ser operados por particulares y empresas privadas. Pueden estar equipados con cámaras térmicas de alta resolución, o incluso con tecnología de reconocimiento facial y equipos de audio. Los particulares pueden manejar los drones mediante mandos a distancia o a través de smartphones.
¿Por qué está mal? Nuestra privacidad se ve violada por invitados voladores no deseados que pueden registrar los movimientos y capturar imágenes en cualquier momento, sin nuestro conocimiento ni permiso. La vigilancia con drones tiene un fuerte efecto sobre las poblaciones. Está documentado que las personas que están siendo observadas tienden a comportarse de manera diferente que cuando no están siendo vigiladas.
La tecnología de los drones puede utilizarse de forma clasista y teniendo en cuenta elementos raciales para espiar a determinadas poblaciones y para vigilar a los organizadores políticos.
Más información en:
POGO (Project On Government Oversight) | These Police Drones are Watching You
ACLU | Protecting Privacy From Aerial Surveillance: Recommendations for Government Use of Drone Aircraft